La segunda es que este es el bizcocho que uso para prácticamente todas mis tartas de fondant, ya que es firme y jugoso a la vez. Para mi es tan importante el exterior como el interior así que no me sirve de nada entregar una tarta decorada súper chula si luego cuando te la comes esta seca o no sabe a nada. Así que esta es la que hago, la base, y luego le voy cambiando el sabor al gusto, con chocolate, agua de azahar o pastas concentradas, casi siempre de home chef.
Bueno pues ahí va la recetilla...
INGREDIENTES:
- 3 HUEVOS grandes
- 2 YOGUR griego natural sin azúcar.
- 2 medidas del vaso de yogur de AZÚCAR
- 3 medidas de HARINA de trigo
- 1 medida de ACEITE de oliva suave o de girasol (yo prefiero girasol y nunca lleno el vaso del todo)
- 1 cucharada de postre LEVADURA (o un sobre)
- 1 cucharada de postre de ESENCIA de vainilla (en el caso de que no le pongáis otro sabor)
ELABORACIÓN:
Pre calentar el horno a 180º
Primero vacío un vaso de los de yogur en un bol (ya se que es un poco rebuscado pero pienso que me da mejores resultados) y con ese yogur voy haciendo las medidas.
Separar las yemas de las claras. Poner las yemas en un bol junto con el azúcar y batir con unas varillas eléctricas hasta que blanqueen y aumenten su volumen. Añadir los yogures y seguir batiendo hasta que este integrado. Hacer lo mismo con el aceite.
Tamizar dentro del mismo bol la harina junto con la levadura y seguir batiendo, luego añadir la esencia d e vainilla y batir bien hasta que todo este bien integrado.
Por otro lado batir las claras a punto de nieve y una vez las tengamos añadir una cucharada de ellas al bol de la mezcla y mezclar con movimientos envolventes hasta que este integrado. Seguir con el resto de las claras e ir mezclando la masa con cuidado para que no se bajen las claras.
Poner en el molde engrasado y hornear durante unos 45 min o hasta que al introducir un palillo en el medio, éste salga limpio.
Nota; yo he decorado con azúcar y piñones, antes de introducirlo en el horno. Decorar al gusto
